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Bajadas de tensión: causas, síntomas y tratamientos

Salud laboral
Bajadas de tensión: causas, síntomas y tratamientos

Cuando hablamos de tensión alta o baja, realmente estamos hablando de la presión arterial. Cuando la presión arterial se sitúa por debajo de los valores normales, se produce la denominada hipotensión. Normalmente, las personas suelen preocuparse o darle mayor importancia a una presión arterial alta o hipertensión, pero la hipotensión también conlleva unos riesgos y unos síntomas que no debemos pasar por alto.

Desde MAS Prevención queremos proporcionarte toda la información relevante respecto a este problema, más habitual de lo que se pueda pensar, y que puede darse en el trabajo.

¿Qué es la presión arterial baja?

Antes de nada, debes entender qué es la presión arterial, que no es otra cosa que una medida de la fuerza con la que la sangre presiona contra las paredes arteriales a medida que se desplaza por ellas.

Existen dos valores que conforman la presión arterial, la presión sistólica y la diastólica. El valor sistólico es el valor máximo y es el que se muestra cuando el corazón bombea sangre. Mientras que el valor diastólico es el menor valor y mide la fuerza de la presión en el momento en el que el corazón está relajado.

La presión arterial baja o hipotensión se da cuando los valores se sitúan por debajo de los normales, es decir, por debajo de 90/60 mm Hg. Y hay varios tipos de bajada de tensión en función de la causa que lo provoca y de la gravedad.

Hipotensión ortostática

Es una de las bajadas de tensión más comunes y suele suceder cuando pasas repentinamente de estar tumbado a estar de pie. Generalmente dura unos pocos segundos, y afecta más a adultos y sobre todo a personas con la tensión alta.

Hipotensión mediada neuralmente

Esta bajada de la presión arterial puede producirse cuando pasas mucho tiempo de pie y suele ocurrir más en niños y jóvenes. La causa parece ser un fallo de comunicación entre el bombeo de sangre del corazón y el cerebro.

Shock o hipotensión grave

Es, como su nombre indica, la de mayor preocupación. Puede deberse a una pérdida súbita de sangre, un infarto, una infección grave

Causas de la hipotensión o tensión baja

Las causas por las que se puede producir una bajada de tensión son muy variadas y algunas son más controlables que otras.

1. Embarazo

Durante el embarazo baja la presión arterial debido a que el sistema circulatorio se expande rápidamente. Una vez pasado el parto, los niveles vuelven a su estado normal.

2. Pérdida de sangre

Al reducirse la cantidad de sangre que viaja a través de las arterias, la presión también disminuye, por eso una pérdida de sangre considerable suele producir una bajada de tensión.

3. Problemas cardíacos

La insuficiencia cardíaca, las arritmias o cualquier otra afección del corazón, puede generar un menor impulso de sangre y por tanto una menor tensión arterial o hipotensión.

4. Deshidratación

Cuando el cuerpo no tiene la suficiente cantidad de agua, disminuye también la cantidad de sangre en el cuerpo y, por lo tanto, puede bajar la presión arterial. Enfermedades como la fiebre, diarrea o vómitos pueden generar esta deshidratación y provocarnos una bajada de tensión.

5. Falta de nutrientes

La falta de nutrientes como la vitamina B-12, la falta de hierro y otros nutrientes puede provocar una insuficiencia de glóbulos rojos que acabe derivando en una anemia. Esta, a su vez, puede terminar produciendo hipotensión.

6. Medicamentos

Algunos fármacos como los ansiolíticos, diuréticos, antidepresivos o los que ayudan a combatir la hipertensión pueden producir una bajada de presión arterial.

Síntomas de una bajada de tensión

Los síntomas de una hipotensión son reconocibles y no varían mucho.

  • Mareos, sensación de aturdimiento, falta de equilibrio o de estar a punto de desmayarse
  • Náuseas y vómitos
  • Visión borrosa
  • Sensación de debilidad
  • Somnolencia
  • Confusión
  • Fatiga
  • En el peor de los casos se puede llegar al desmayo y a perder la conciencia momentáneamente

Tratamiento de la hipotensión

Para los casos en los que ya se está produciendo, lo primero que se debe hacer es ayudar a la persona que la está padeciendo a sentarse o incluso tumbarse. Posteriormente, deberemos levantarle los pies por encima del nivel del corazón para ayudar a regular su tensión.

Para las personas que padecen bajadas de tensión habitualmente y para aquellos que sienten que la pueden padecer, es recomendable seguir una serie de hábitos:

  • Llevar una alimentación saludable
  • Añadir sal a la dieta
  • Consumir más líquidos
  • No estar demasiado rato de pie ni levantarse rápidamente cuando estás sentado
  • Limitar el consumo de cafeína y alcohol
  • Usar medias de compresión
  • Visitar al médico por si pudiera recetar algún tipo de medicamento en caso de ser necesario

Desde MAS Prevención nos preocupamos por la salud de los trabajadores, por eso ofrecemos un servicio de reconocimientos médicos de primera calidad, para que tus empleados puedan trabajar sabiendo que su salud es óptima.

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